RIO DE JANEIRO (AP) — Edward Snowden, el ex analista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) que dio a conocer programas de vigilancia electrónica, escribió que está dispuesto a ayudar al gobierno brasileño a investigar el espionaje, pero sólo puede hacerlo si le dan asilo político, porque el gobierno estadounidense “seguirá interfiriendo con mi capacidad para hablar”.
En una extensa “carta abierta al pueblo de Brasil” obtenida el martes por la Associated Press, Snowden elogió al gobierno de Brasil por su posición enérgica frente al espionaje estadounidense.
Dijo que se siente alentado por el debate global que provocó su difusión de miles de documentos de la NSA, cuya cultura de espionaje global indiscriminado, aseguró, “se está derrumbando”.
Las primeras revelaciones sobre los programas de espionaje de la NSA aparecieron en junio, basadas en algunos de los miles de documentos que Snowden entregó a Glenn Greenwald, periodista estadounidense que vive en Brasil, y a su socia la cineasta norteamericana Laura Poitras.
Según esos documentos, Brasil es el principal blanco de la NSA en Latinoamérica, y ese programa ha incluido el monitoreo del teléfono móvil de la presidenta Dilma Rousseff.
Enfurecida por las revelaciones, Rousseff canceló en octubre una visita en a Washington que incluía una cena oficial con el presidente Barack Obama. La mandataria brasileña se ha unido a Alemania para presionar a las Naciones Unidas a que apruebe una resolución simbólica que tiene por fin extender los derechos de privacidad a todas las personas.
En su carta, Snowden descartó las explicaciones de Washington al gobierno brasileño y otros, de que se trataba de programas de “recolección de datos” más que de vigilancia.
“Existe una diferencia enorme entre los programas legales, el espionaje legítimo… y estos programas de vigilancia masiva que colocan a poblaciones enteras bajo un ojo que todo lo ve y salva las copias para siempre”, escribió. “El objetivo de esos programas nunca fue el terrorismo: es espionaje económico, control social y manipulación diplomática. Se trata del poder”.
Senadores brasileños han pedido ayuda a Snowden durante audiencias sobre las actividades de la NSA en Brasil, un importante centro de tránsito de los cables de fibra óptica para las comunicaciones transatlánticas. Tanto Greenwald como su pareja David Miranda hablaron ante el Senado, y este último ha tomado la causa de persuadir a Brasilia que otorgue asilo político a Snowden.
El ex contratista, quien vive en Rusia con una visa temporal de un año, había solicitado anteriormente asilo a Brasil y otras naciones.
La cancillería brasileña y la oficina presidencial dijeron el martes que no harían declaraciones por el momento sobre la carta o un pedido de asilo pendiente.
Rousseff ha ordenado a su gobierno que tome varias medidas, como la instalación de cables de fibra óptica directamente a Europa y Sudamérica, en un esfuerzo por “divorciar” a Brasil de la columna vertebral de internet, controlada por Estados Unidos, que según los expertos ha facilitado el espionaje de la NSA.
La carta de Snowden apareció el martes en traducción al portugués en el diario Folha de S. Paulo. La AP obtuvo luego la versión original en inglés.
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Bradley Brooks está en Twitter como: www.twitter.com/bradleybrooks