PYONGYANG, Corea del Norte (AP) — Dennis Rodman ofreció disculpas el jueves por los comentarios que hizo en Corea del Norte en torno a un misionero estadounidense detenido, argumentando que había bebido y estaba muy presionado mientras organizaba un partido con ex jugadores de la NBA.
El astro del básquetbol emitió la disculpa a través de su publicista Jules Feiler en un correo electrónico dirigido a The Associated Press, un día después de que le cantó “Feliz cumpleaños” al líder norcoreano Kim Jong Un al principio del partido de exhibición.
Rodman ha sido duramente criticado por no utilizar su influencia con Kim para ayudar a liberar a Kenneth Bae, el misionero que padece problemas de salud y está confinado en Corea del Norte por crímenes “contra el Estado”. En una entrevista con CNN el martes, el basquetbolista insinuó que Bae tenía la culpa.
“Quiero pedir disculpas”, afirmó Rodman el jueves. “Asumo toda la responsabilidad por mis acciones. Había sido un día muy estresante. Algunos de mis compañeros se retiraban (de la iniciativa) debido a la presión ejercida sobre ellos por sus familias y socios de negocios. Mi sueño de la diplomacia del básquetbol se estaba desmoronando rápidamente. Había estado bebiendo. No es una excusa, pero para cuando se realizó la entrevista yo estaba molesto. Estaba abrumado. No es una excusa; es sólo la verdad”.
Rodman dijo que primero quería ofrecer disculpas a la familia de Bae.
“Lo lamento mucho. A estas alturas ya debería saber que no debo hacer declaraciones sobre política. Realmente lo siento mucho”, afirmó.
En la entrevista se le preguntó a Rodman si plantearía la cuestión de Bae durante su visita.
“Kenneth Bae hizo una cosa”, respondió el basquetbolista. “Si usted entiende lo que Kenneth Bae hizo, ¿usted entiende lo que hizo en este país?”
Cuando se le pidió que explicara su afirmación, Rodman no quiso responder.
Bae, un misionero cristiano coreano-estadounidense y operador turístico radicado en China, ha estado detenido más de un año. Corea del Norte considera el trabajo misionero como una amenaza a su gobierno.
La hermana de Bae, Terri Chung, dijo que su familia no podía creer lo que Rodman había dicho en una entrevista.
“Aquí está alguien que está en posición de hacer algo bueno por Kenneth y se niega a hacerlo”, declaró Chung el miércoles a la radiodifusora KOMO en Seattle. “Y luego de eso, mejor decide arrojar estas acusaciones infundadas contra Kenneth. Está claro que no tiene idea de lo que está diciendo. No estoy segura de con quién está hablando, de dónde obtiene su información, pero ciertamente no es una autoridad en Kenneth Bae”.
El Departamento de Estado norteamericano se distanció de Rodman y dijo que no quería “dignificar” sus actividades o comentarios en Pyongyang al emitir declaraciones sobre ellos. Pero la portavoz Jen Psaki indicó que el Departamento está abierto a hablar con él cuando regrese.
“No lo hemos contactado. Ya lo hemos dicho, si quiere contactarnos, nos alegrará saber de él y escuchar lo que tenga que decir”, declaró a la prensa.
Rodman dedicó el partido a su “mejor amigo” Kim, que junto con su mujer y otros altos funcionarios y sus esposas lo observaron desde un área reservada. Las aproximadamente 14.000 personas que llenaron el Estadio Techado de Pyongyang aplaudieron ruidosamente cuando el basquetbolista entonó un verso de la canción de cumpleaños y luego se inclinó profundamente ante Kim.
El basquetbolista dijo sentirse honrado de poder jugar el partido en la capital norcoreana y consideró que se trataba de un evento “histórico”. Sin embargo, algunos miembros del Congreso estadounidense, la NBA y grupos defensores de los derechos humanos dicen que se ha convertido en una herramienta de relaciones públicas para el gobierno de Corea del Norte.
Rodman es el estadounidense de mayor perfil en reunirse con Kim, que heredó el poder tras la muerte de su padre en 2011. El jugador ha dicho que no es un estadista y que sólo intenta forjar vínculos culturales con los norcoreanos a través del básquetbol, los cuales podrían ayudar a mejorar las relaciones entre Pyongyang y Washington.
Junto con Rodman viajaron Kenny Anderson, Cliff Robinson y Vin Baker, todos participantes en el Juego de Estrellas de la NBA. También estuvieron Craig Hodges, Doug Christie, Charles D. Smith y cuatro jugadores callejeros.