JERSEY CITY, Nueva Jersey, EE.UU. (AP) — La madre y abuela de Demaryius Thomas alentarán el domingo al receiver de los Broncos mirando por televisión el Super Bowl desde la cárcel, ambas con camisetas con el número que confeccionaron con tiras de cintas adhesiva.
Las dos mujeres nunca han visto a Thomas jugar en persona. Tenía 11 años cuando la policía irrumpió en la casa de su familia en Montrose, Georgia, y arrestó a las dos mujeres en 1999 por delitos de drogas. La policía permitió que Katina Smith llevara por última vez a su hijo y a sus dos hermanas menores al autobús que les llevaba a la escuela.
Smith se encuentra en una prisión en Florida, purgando una sentencia de 20 años. Su madre, Minnie Pearl Thomas, quien arrastraba dos condenas previas por delitos de drogas, recibió dos sentencias de cadena perpetua con la posibilidad de conseguir la libertad condicional tras 40 años. Smith pudo haber recibido una condena menor si hubiese testificado contra su madre, pero se negó.
Ambas verán a Thomas disputar su primer Super Bowl el domingo, en el que estará en un mano a mano con Richard Sherman, el estelar cornerback de los Seahawks.
“Creo que me motiva más saber que me estarán mirando”, dijo Thomas. “Trataré de hacer lo mejor para que puedan hablar de eso en la cárcel”.
El padre de Thomas cumplía servicio con el ejército en Kuwait cuando su madre y abuela fueron arrestadas. Fue a vivir con sus tíos, Shirley y James Brown, éste último un pastor bautista.
“Cuando me mude a su casa, le dije (a mi tío) que quería hacer algo para estar alejado de las calles, alejado de los problemas, así que metí al fútbol americano”, dijo Thomas. “Fue una buena decisión”.
Thomas jugó en la Universidad de Georgia Tech y fue la primera selección de Denver en el draft de 2010. Las lesiones le impidieron despegar en la liga hasta que atrapó el pase de touchdown de 80 yardas de Tim Tebow en tiempo extra para vencer a Pittsburgh en los playoffs.
Dos meses después, Peyton Manning firmó con Denver y Thomas ha brillado como nunca, con 204 pases atrapados para 3.089 yardas y 27 touchdowns en las últimas dos temporadas.
Pero Thomas es la antítesis del wide receiver con aire de diva que exige pases y atención. No le dice nada al cornerback a cargo de cubrirle, mucho menos burlas.
Fue el líder de los receptores de la NFL con pases de touchdowns atrapados (14) y yardas conseguidas tras la recepción (718) esta temporada. Totalizó 92 pases atrapados para 1.430 yardas. En los playoffs, lleva 15 pases atrapados para 188 yardas y touchdowns en las dos victorias de Denver.
“Verlo madurar como jugador y persona ha sido tremendo”, dijo su compañero Eric Decker.