LAS VEGAS (AP) — Los hombres en traje blanco, con el pecho peludo y lentes de contacto azules que posan con admiradores afuera de la sala de exposiciones del que fuera el Hilton de Las Vegas no quieren que los llamen imitadores de Elvis.
El término correcto es artista homenaje a Elvis, para distinguir sus estudiadas actuaciones de las de los montones de personajes que deambulan por la famosa calle principal de la Ciudad del Pecado.
“No es un chiste”, explicó Jason Sherry, productor del Festival de Elvis en Las Vegas del fin de semana, uno de varios autorizados por el patrimonio de Presley como antesala a la Semana de Elvis en Memphis, Tenesí, en agosto. “No significa que no lo disfrutemos. Pero no estamos burlándonos de Elvis”.
Unas tres docenas de artistas homenaje a Elvis llevaron el balanceo de sus caderas y su característico mohín al escenario el fin de semana para ver quién podía dar la actuación más convincente. Los premios incluyeron 2.500 dólares en efectivo para el mejor artista y la oportunidad de representar a Las Vegas en la máxima competencia de artistas homenaje a Elvis durante la Semana de Elvis.
Eli Williams, un residente de Vancouver, Columbia Británica, que quedó en segundo lugar, dijo que hacía karate, igual que el Rey del Rock n Roll.
“(El karate) hizo que todo lo que él hacía tuviera sentido”, dijo Williams, de 26 años, sobre los movimientos de Presley en el escenario.
Como muchos artistas homenaje a Elvis, Frank Werth, un vendedor en Hays, Kansas, compra sus trajes de B&K Enterprises, una compañía que emplea al hombre que diseñó monos para el mismo Elvis.
Un traje complejamente bordado puede costar 4.000 dólares, mientras la capa que le hace juego puede ascender a 500.
“Tratamos de recrear (los shows) tan cuidadosamente como podemos”, dijo Werth, de 32 años, que terminó en tercer lugar. “Todo está hecho con gusto”.
Los eventos licenciados ayudan al patrimonio de Elvis Presley a cultivar una base de seguidores décadas después de que las estaciones de radio dejaran de tocar “Love Me Tender”, y promueven los aspectos más positivos de su vida y su carrera, dijo Sherry.
La seducción de Elvis a través de las generaciones era evidente entre la docena de personas que vinieron de Penticton, Columbia Británica, a Las Vegas para ver a su concitadino Adam Fitzpatrick, de 29 años, ganar.